Badajoz. Teatro López de Ayala. 8-III-2019. Antonio García Jorge, saxofón. José Vicente Moirón, narrador. Sonido Extremo. Director: Jordi Francés. Obras de Murail, Magrané, Badalo y Rzewski. · Palacio de Congresos. 14-III-2019. Carmen Solís, soprano. Juan Pérez Floristán, piano. Orquesta de Extremadura. Director: Domingo Hindoyan. Obras de Mozart y Brahms-Schoenberg.
Asombra y admira la vitalidad musical de la ciudad de Badajoz, siempre abierta a nuevas músicas e intérpretes. En apenas unos días se han sucedido estrenos y primeras audiciones de obras de compositores como Murail, Magrané, Rzewski o Inés Badalo, oliventina de 1989 de quien el grupo Sonido Extremo estrenó con carácter absoluto Iridiscencia, pieza cargada de sutilezas y detalles de muy fina orfebrería instrumental, consecuencia de un encargo del propio Sonido Extremo, conjunto de vanguardia y fuste que, bajo la dirección de Jordi Francés, la ofreció en una realización empeñada en subrayar los matices más delicados y diversos de una escritura que es soporte del fecundo universo de una creadora plena de ideas y talentos.
En el mismo programa, que clausuraba el X Ciclo de Música Actual, se escucharon L’argent com viu, para saxofón soprano y conjunto instrumental, obra reveladora del genio de Joan Magrané —uno de los más atractivos y documentados nombres de la nueva música española—, que se enriqueció con la virtuosa participación solista de Antonio García Jorge; Treize Couleurs du soleil couchant, compuesta en 1978 por Murail, y Coming together, fechada en 1972 bajo el influjo del minimalismo y fiel reflejo del grito singular que tanta veces supone la música de Rzewski. Como narrador impostado y en un inglés más próximo al de Ana Botella que al de Laurence Olivier intervino el actor extremeño José Vicente Moirón. Los profesores del imprescindible conjunto Sonido Extremo hicieron alarde una vez más de su valía y profesionalidad en este programa denso, comprometido y sin concesiones, en cuyo éxito resultó fundamental el trabajo puntilloso y siempre efectivo del maestro Jordi Francés.
Apenas unos días después, la Orquesta de Extremadura tocó bajo la dirección del venezolano Domingo Hindoyan (Caracas, 1980) esa obra maestra de Brahms y también de Schoenberg que es la orquestación que este hizo del Cuarteto con piano en Sol menor del hamburgués. Hindoyan y los sinfónicos extremeños plasmaron una versión henchida
de expresiones y registros. Rica y plural, más importante en el concepto que en su realización. En el mismo programa la soprano pacense Carmen Solís derrochó su generosa categoría artística y vocal en la mozartiana aria de concierto Ch’io mi scordi di te?, enriquecida con la participación ‘obligada’ al piano de Juan Pérez Floristán, quien a su vez fue coprotagonista de una impecable versión del Concierto para piano no 21 de Mozart, que él ornamentó en el primer movimiento con una vistosa y bien escrita cadencia salida de su propia cosecha, mientras que para el tiempo final optó por la de Géza Anda. Como propina y colofón de su exitosa actuación, el joven pianista sevillano tocó el célebre Momento musical de Schubert (D 780, no 3), cuyo diminuendo final calibró admirablemente hasta el más tenue silencio.
Justo Romero